Ël y yo nos hicimos amigos en una pelea.
Resultaba entonces que a veces se ponía muy pesado
temporadas enteras reñiamos todos los días
luego desaparecía como si tal cosa
sabiendo que no podemos pasar el uno sin el otro,
en parte por propio abandono
dejadez, inercia tonta.
Y en sus ausencias mas largas
siempre lo esperé bebiendo cerveza por los dos
mientas la música se encargaba de todo,
a pesar de que diez litros de birra no hagan que vuelva,
igual si me bebo otros diez la cosa cambia
si le juro que no ando de sobredosis.
Y durante un cigarrillo de tranquileo
el muy cabrón viene a buscarme
porque ser un cabrón está al alcance de todos.
Y cuando paso mucho tiempo sin sentirlo
de veras que se me saltan las lágrimas en las bodas
de ver que sigue vivo.
Otras veces no se si creerme toda esa mierda del amor,
se hace tanto de rogar
que ya no se que pensar.
Si ese pilar se derrumba
nos vamos a ir todos a tomar por culo
te lo digo en serio,
de todas hemos salido
pero esta sería sin duda la peor
peor incluso que pasar la escarlatina en Madrid.
Al final a todo se hace uno
aunque no deje de ser una putada.
Sinceramente me la suda
voy a amar a cualquier precio.
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